lunes, 30 de junio de 2008

Hace demasiados meses
que mis payasadas no provocan
tus ganas de reír
No es que ya no me intereses,
pero el tiempo de los besos y el sudor
Es la hora de dormir.

Duele verte removiendo
la cajita de cenizas que el placer
tras de sí dejó
Mal y tarde estoy cumpliendo
la palabra que te di cuando juré
Escribirte una canción

Un dios triste y envidioso nos castigó
por trepar juntos al árbol
Y atracarnos con la flor de la pasión
por probar aquel sabor.

El agua apaga al fuego y al ardor los años
Amor se llama el juego en el que un par de ciegos
juegan a hacerse daño
Y cada vez peor y cada vez mas rotos
Y cada vez más tú y cada vez más yo sin rastro de nosotros

Ni inocentes ni culpables
corazones que desbroza el temporal
Carnes de cañón. No soy yo, ni tu ni nadie
Son los dedos miserable que le dan
cuerda a mi reloj

Y no hay lágrimas que valgan para volver
a meternos en el coche
Donde aquella noche en pleno carnaval
te empecé a desnudar.

El agua apaga al fuego y al ardor los años
Amor se llama el juego en el que un par de ciegos
Juegan a hacerse daño...

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